Siempre pedimos
que se nos dé,
En especial a los nuevos años:
Quiero paz y
felicidad
Dejar de fumar
Ir al gimnasio
Pero al final de
tanto pedir
Nos acomodamos en
la silla
A la espera. Así
no sé si funciona.
Podemos intentar,
por esta vez, dar
Un poco de amor a
cada ser humano.
No cuesta nada,
Y se nos expanden
las entrañas,
Se nos abren los
pulmones
Y podemos
respirar sin corsés.
Entrego a este
nuevo año
Todos mis
defectos condensados
Y que haga lo que
le apetezca
Con sus
destellos.
Un poema oscuro
Un dibujo mortal
Una cabeza
cortada de Gorgona.
Voy a darle a
este futuro
Un presente nuevo
y de verdad,
Sin miramientos
ni tensiones,
Injusticias ni
falsedades.
Lo que si te
rogaré, piadoso 2017,
Es que veles por
nosotros,
Por la fortaleza
de ejecutar
Las promesas
formuladas
Y los proyectos por
hacer.
No su
cumplimiento.
Despiértanos de
la ilusión
de la expectativa
y réganos
con dulzura para
que podamos
crecer siempre
hacia arriba
y echar raíces hasta
el centro mismo
de la tierra para
que nuestras ramas
acaricien el
firmamento.