Muestro carne no
para que te la comas,
Sino para que
adviertas los relieves
De mis formas.
Algo te ha hecho
pensar que soy un objeto,
Un tiesto o un
florero, en el caso que
Mi silueta te
transmita belleza.
¿Crees que mi
ímpetu me empujará a buscarte
Y a suplicar que
me penetres como tus dedos
hacen en un
guante de terciopelo?
Una vez usada y gastada, me tirarás
Al contenedor de
la basura, en medio de las sobras,
Y merodearás para
conseguir otra media novia
De expresión más
marcada de cordero degollado.
Conozco el placer
que te causa corromper
El cuerpo que no
ha sido todavía mancillado.
Permitiré que me
degustes en la distancia
Y que me
configures en tu imaginación como
te plazca, siempre
a salvo de tus caninos y garras.
No gustas de
manzanas probadas,
Siempre es más
exquisito el sabor
De la que se
encuentra inmaculada.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada