De centro a
periferia,
Para olvidarte he
tenido
Que solucionar
otros temas.
Ahora que he
llorado y
secado las
lágrimas de tu pérdida,
Me doy cuenta que
eres el
Menor de mis
problemas.
Eras algo
parecido a un tapón
Que tapa un
surtidor petrolífero,
el combustible más
oscuro y
potente de empuje
de mis
impulsos más
trascendentales.
No sé nada de ti,
No te echo tan de
menos,
Aunque a ratos,
un cordón elástico
Todavía me une a
tu persona
Como una comba
sinuosa
Del color de las
serpientes.
Para descubrir mis
evidencias internas
Llegué hasta
tierras desconocidas
Con las
vestiduras de la demencia.
Me daba miedo la
negrura, hasta
Que comprendí que
es mi
principal elemento
en la caverna
inconsciente del arte
de la escritura.
Cuando volví de
mi viaje,
Dejé de ser la
misma valerosa
Y luchadora de
metas
Imposibles y destructoras.
Ya no soy tu
sumisa,
Ya basta de velarte
en la cuna
Y aspirar
bocanadas
de tus penurias.
Sé que no es tu
tú intrínseco
El que opera en
tus lamentos,
Sino la bruma
tenebrosa
Que te consume en
sueños.
Cuanto más
agresiva
en mi abandono,
más obligado
estás a combatir sólo
contra
tu monstruo. A mí
no me
pertenecen ni el
éxito ni la gloria.
Sería un acto
sacrílego.
L'autor ha eliminat aquest comentari.
ResponEliminaL'autor ha eliminat aquest comentari.
ResponElimina